Uno de los más modernos sistemas de imagen médica, combina un método de
medicina nuclear (PET) con la Tomografía Computada (CT).
En oncología es muy útil para confirmar la existencia de un tumor maligno, así como para conocer su extensión precisa ya que es un método en el que se explora todo el cuerpo en una sola sesión. Es de gran valor para conocer la respuesta al tratamiento y para detectar las recurrencias de diversos tumores.
En Neurología se emplea especialmente para estudiar pacientes con sospecha o diagnóstico de alguna variedad de demencia, especialmente tipo Alzheimer. Se ha empleado también para evaluar pacientes con ciertos tipos de epilepsia.
En cardiología se emplea especialmente para evaluar el estado del músculo cardiaco en pacientes que tienen o han tenido un infarto.